Sí. Hemos seguido las directrices y los requisitos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Sur, de los funcionarios sanitarios locales y de las recomendaciones de los Centros de Control de Enfermedades. Todas las decisiones relativas a nuestras prácticas durante la pandemia han sido informadas y guiadas por expertos de la comunidad médica.